BODA REAL EN PUGLIA
De las palabras de nuestra novia Assunta
¡¡¡SÍ, LO QUIERO!!!
11/08/2018 , París en todo su esplendor, una propuesta y una respuesta incuestionable: ¡SÍ, LO QUIERO! Así comienza nuestro viaje. Esta decidido. ¡Nos casaremos en PUGLIA el 13/08/2020!
Los primeros pasos de un viaje tan esperado y deseado estuvieron acompañados de mucho entusiasmo. Navegando por la red nos adentramos en la búsqueda de un profesional de bodas que pudiera guiarnos para hacer de nuestro día especial algo único e inolvidable. Así conocimos a Elena , organizadora de bodas de profesión, que inmediatamente nos impresionó por su estilo rápido y su afable disponibilidad.
Comenzó nuestra fantástica aventura y partimos con la selección de nuestros primeros proveedores, lo que sirvió para alimentar la ilusión de un día que parecía cada vez más cercano pero que en realidad se alejaba ante un futuro próximo impredecible. Sin darnos cuenta de nada, los días transcurrieron y las piezas de nuestro rompecabezas poco a poco fueron encajando:
- Antonio , la luz de sus tomas, la luz del sol y la espontaneidad de sus sujetos: así quisimos inmortalizar nuestro cuento de hadas de amor;
- Federico , su arte cinematográfico cautivador y romántico capaz de conmover incluso en tan solo unos minutos: esta iba a ser la película de nuestros días;
- Francesca , la voz profunda y sensual, el sonido inconfundible de su banda: estas fueron las notas alegres de nuestra recepción.
Septiembre de 2019 , quizás el paso más esperado: ¡elegir el vestido! Entre tules, bordados y finos tejidos uno queda deslumbrado por tanto esplendor. Empiezas con una idea y, como me avisaron con antelación, llegas en dirección completamente opuesta. La prueba del vestido de novia es una experiencia única que culmina con el reflejo del espejo proyectado en los ojos brillantes y soñadores de una mujer que por primera vez se ve y se siente verdaderamente una novia: ¡MAGÍA!
Finales de febrero de 2020. Definición final del menú… lo máximo está hecho, falta poco… Y NUNCA.
Es superfluo detenerse en lo que, como todos saben, ocurrió en los meses inmediatamente siguientes. Dominaban el miedo, la duda y la incertidumbre. No se suponía que fuera así, no era así como imaginamos nuestro día especial. Siguió una decisión dolorosa: la boda se pospuso hasta una fecha posterior.
el 13 de agosto , fecha que recordaremos oficialmente como la de nuestra no boda;
Pasó como cualquier otro día, incluso peor. En esta fase de total confusión, la aportación de Elena fue crucial. Ella nos ayudó a elegir una nueva fecha que al mismo tiempo nos conviniera a nosotros y a los proveedores: ¡30 de junio de 2021!
Los preparativos, así, continuaron, aunque en la más absoluta incertidumbre que no se disolvió hasta unas semanas antes del día fijado para el acontecimiento cada vez más esperado. Uno se tambaleaba en la oscuridad intentando, a veces sólo con imaginación, imaginar cómo podríamos casarnos: ¿Sólo en la iglesia sin recepción? ¿Con recepción y límite de invitados?
Así, los momentos más emocionantes como la elección de obsequios nupciales, arreglos florales, gráficos fueron acompañados por las constantes actualizaciones de DPCM y decretos… y muchas veces el ambiente de alegría fue reemplazado por la duda de que probablemente uno de los días más importantes de la vida podría no serlo. como soñábamos cuando éramos niños.
Nos acercamos cada vez más a todo el extraordinario mundo de las bodas, compartiendo dudas, miedos e incertidumbres y sintiéndonos cada vez más parte de una gran familia que por oficio y pasión hace cuentos de hadas!
La oficialidad de la reanudación de la industria de las bodas a partir del 15 de junio de 2021 no podía más que hacernos muy felices y ahora, meses después de nuestra boda, podemos decir que toda la espera, perseverancia y determinación de años ha sido ampliamente recompensada.
06/30/2021 Fue un día maravilloso para nosotros como recién casados y para todos nuestros invitados. Dejamos atrás una larga y mala etapa y vivimos y compartimos esas emociones fuertes que sólo una boda de amor puede dar. La alquimia creada por todos aquellos que ayudaron a hacer realidad nuestro sueño embelleció cada momento, haciendo que el día de nuestra boda fuera mágico e inolvidable.
Firmó una novia feliz que siempre y con inmensa alegría la recordará ¡ SÍ LO QUIERO!
